La denominada "Quebrada Seca" es una de las microcuencas de mayor importancia en la localidad para el resguardo de la flora nativa de la zona. La quebrada presenta flora nativa que se conserva gracias a la mayor disponibilidad de humedad, lo que es posible por la morfología de la cuenca, que posee características de encajonamiento, con laderas de pendiente moderada, que son capaces de captar la humedad costera. Cabe señalar que el santuario alberga más de 100 especies de flora, mayoritariamente endémica, de la cual aproximadamente el 48% se encuentra en categoría de conservación, localizadas en la playa y campo dunar y las restantes se hallan principalmente en el sector de la Quebrada Seca.
El área contiene cerca de 100 especies de vertebrados nativos, algunos en categoría de conservación.