La Reserva Marina posee numerosas características que lo hacen único en la costa de Chile ya que, físicamente se encuentra en una zona donde hasta ahora el impacto de la actividad antrópica es limitado, al no existir grandes centros urbanos en sus cercanías. Es el hábitat de numerosas especies emblemáticas y objeto de conservación como el Delfín nariz de botella (Tursiops truncatus), el Chungungo (Lontra felina), el Pingüino de Humboldt (Spheniscus humboldti) y el Yunco (Pelecanoides garnotii); además de ser un área donde se produce surgencia permanente; con altas densidades, tasas de retención y reclutamientos de larvas de especies de gran importancia comercial y comunitaria como el Loco (Concholepas concholepas), Lapas (Fissurella spp.), Erizo (Loxechinus albus) y las praderas de algas pardas constituidas por las especies del género Lessonia spp. Es también, una de las zonas con mayores tasas de desembarque de pesquerías bentónicas de la región. Respecto a los valores complementarios que posee, es un área de interés turístico, con visitantes concentrados durante el período estival, y que posee gran potencial para el desarrollo de actividades eco-turísticas, y en este sentido, existen comunidades de pescadores en el sector, que si bien dependen primeramente de las actividades pesqueras, durante el verano obtienen ingresos a partir de las actividades turísticas (Gaymer, C. et. al., 2007; SERNAPESCA, 2007).